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El cambio de amortiguadores gastados, una inversión rentable para las flotas

El cambio de amortiguadores gastados, una inversión rentable para las flotas
  • Publishedmarzo 28, 2022

Los camiones, remolques, furgonetas de reparto y otros vehículos comerciales solo pueden contribuir a los resultados finales de sus empresas cuando están trabajando. Y es que un enfoque inteligente de su mantenimiento preventivo puede marcar la diferencia en términos de costes y gastos para los gestores y dueños de flotas. La especialista en piezas de suspensión y dirección Monroe recuerda al respecto que una de las necesidades de mantenimiento más olvidadas, pero también de las más cruciales (y relativamente económicas) es la amortiguación. Por ello, la marca de DRiV incide en la importancia del cambio de amortiguadores gastados en el paso del vehículo comercial por el taller.

cambio de amortiguadores gastados, una inversión rentable para los gestores de flotas de camiones

¿Qué hacen realmente los amortiguadores?

Los amortiguadores de vehículos comerciales no están simplemente diseñados para «absorber» los impactos de la carretera, sino también para:

  • Controlar el movimiento de las ruedas: Mantener un «agarre» firme en la carretera es clave para la seguridad del vehículo. Los amortiguadores ayudan a mantener los neumáticos firmemente plantados en la carretera al limitar la tendencia de las ruedas a rebotar en baches y otras superficies irregulares. Cuando los amortiguadores se desgastan pueden perder esta capacidad, lo que no solo reduce la tracción sino que también puede aumentar el desgaste de otros componentes más costosos.
  • Proteger llantas, muelles y piezas de suspensión/varillaje de dirección: la durabilidad de estos componentes se puede ver muy reducida con el uso de amortiguadores desgastados. Por ejemplo, una de las formas más comunes de desgaste prematuro de los neumáticos es el «ahuecamiento» o la presencia de puntos altos y bajos en la banda de rodamiento, los cuales aparecen por un movimiento excesivo hacia arriba y hacia abajo o la vibración del neumático, una condición que es mucho menos probable que ocurra con amortiguadores que funcionen correctamente. Otro ejemplo es el desgaste prematuro de los muelles, que a menudo es causado por una extensión excesiva de la bolsa de aire o el fuelle debido a un bache profundo, al contacto con una acera u otro impacto severo. Los amortiguadores actúan como un limitador de suspensión vital, por lo que un amortiguador que funcione correctamente puede ayudar a prevenir este daño. Por último, conviene considerar que la vibración del vehículo puede poner en riesgo una variedad significativa de componentes electrónicos de camiones y remolques, como lámparas y conexiones de cableado.
  • Reducir la distancia de frenado: incluso los componentes del freno nuevos a menudo no pueden realizar correctamente su trabajo cuando los neumáticos del vehículo han perdido contacto con la superficie de la carretera. Por lo tanto, el rendimiento de los frenos, y en particular la distancia de frenado, puede verse afectada si los amortiguadores están desgastados. Además, pueden causar un mayor desgaste de los frenos de las ruedas delanteras al permitir una transferencia de peso excesiva de la parte trasera a la delantera.
  • Aumentar la comodidad y la confianza del conductor: los buenos conductores son difíciles de encontrar y, a menudo, incluso más difíciles de mantener. Muchos conductores prefieren operar vehículos que estén bien mantenidos y sean más fáciles de controlar en una amplia gama de entornos operativos. Debido a que los nuevos amortiguadores pueden ayudar a mejorar el contacto entre los neumáticos y la carretera, también pueden reducir la necesidad de que los conductores corrijan continuamente la trayectoria de la dirección del vehículo para permanecer en el carril y/o garantizar la estabilidad adecuada.
  • Reducir el coste por kilómetro: dado que los amortiguadores ayudan a proteger una variedad de otros componentes de seguridad intensiva, pueden ayudar a reducir el costo operativo por kilómetro de las flotas de vehículos comerciales. Y es que los amortiguadores son comparativamente económicos en comparación con los resortes neumáticos y otros componentes, además de relativamente fáciles de inspeccionar y reemplazar.

¿Por qué se desgastan?

Para entenderlo, conviene considerar las exigentes demandas diarias que se imponen a un amortiguador de vehículo comercial: se ha estimado que se requiere un amortiguador para proporcionar un promedio de 1,087 acciones estabilizadoras, es decir, compresión y/o rebote, por kilómetro de operación. Para un vehículo comercial que recorre 20.000 kilómetros por año, son 22 millones de acciones estabilizadoras. Para 80.000 kilómetros, son 88 millones de acciones de estabilización. Así, las demandas mecánicas de un amortiguador son enormes, quizás solo igualadas por los neumáticos de su vehículo.

Los amortiguadores convencionales proporcionan estas acciones de estabilización o amortiguación mediante el movimiento del fluido hidráulico interno a través de válvulas diseñadas con precisión. Además del desgaste mecánico diario de sus componentes (las piezas de metal, caucho y plástico que están sujetas a temperaturas extremas y una amplia gama de cargas mecánicas), este fluido interno finalmente pierde viscosidad y elasticidad, reduciendo el rendimiento de amortiguación. Por lo tanto, no se puede asumir que los amortiguadores están en buenas condiciones de funcionamiento basándose solo en una inspección visual.

Un técnico cualificado entiende cómo determinar correctamente la condición de los amortiguadores, incluida la verificación de su temperatura al final de un viaje. Un amortiguador caliente indica que la unidad está realizando su trabajo, ya que el aumento de temperatura representa la energía disipada por las acciones de amortiguación del choque. En cambio, un amortiguador frío podría indicar que el choque ya no está realizando esta importante función. Monroe recuerda que una buena regla general es inspeccionar los amortiguadores cada 20.000 kilómetros y reemplazarlos cada 80.000 kilómetros.

Más lejos con Monroe Magnum

Los amortiguadores de vehículos comerciales Monroe Magnum son la elección de muchas flotas líderes en todo el mundo. ¿Por qué? Por su robustez y diseño preciso con los que ayudan a los clientes a mejorar la seguridad, el rendimiento y la confiabilidad de sus vehículos, teniendo a los conductores seguros, cómodos y satisfechos. Todo ello, logrando reducir el tiempo que esos vehículos pasan en el taller.

Cada amortiguador de eje Monroe Magnum comienza con materiales de primera calidad que han demostrado ofrecer una larga vida útil en las condiciones de funcionamiento más exigentes. Además, incluye un sistema de sellado resistente a altas temperaturas y un buje de primera calidad con un solo enlace para una durabilidad excepcional.

DRiV en España

Los interesados en adquirir o informarse sobre los productos Monroe pueden hacerlo llamando al teléfono 810 808 444, o bien escribiendo un correo a pedidos@driv.com. También pueden visitar su nueva página web enfocada al universo de la posventa en eu.monroe.com/es-es.

Además, la compañía cuenta con un nuevo Call Center (Gurus On-Call) exclusivo para clientes y talleres que comercializan productos de su cartera de marcas. Las vías de contacto son:

 

DRiV

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