Mantener un vehículo de carga internacional cuesta, en promedio, 2.727 euros al año
El vehículo articulado de carga general destinado al transporte internacional implica una gestión detallada de varios componentes críticos, especialmente en lo que respecta a reparaciones, mantenimiento y neumáticos. Son elementos los cuales sirven para asegurar la operatividad y seguridad del vehículo en largas distancias. Anualmente, el coste de los neumáticos asciende a 8.557,92 euros si consideramos un precio medio sin IVA de 713,16 euros por unidad y una duración de 150.000 kilómetros.
El mantenimiento, indispensable para evitar averías y prolongar la vida útil del vehículo, representa un coste de 2.727,30 euros al año, calculado a 0,018182 euros por kilómetro. Mientras que, las reparaciones, que cubren imprevistos y daños no contemplados en el mantenimiento rutinario, ascienden a 5.368,80 euros anuales, con un coste por kilómetro de 0,035792 euros, según el último informe del Observatorio de Mercado del Transporte de Mercancías por Carretera.
Diferentes costes
El vehículo articulado de carga general, con una potencia de 455 CV (335 kW) y una masa máxima autorizada de 40.000 kg, está diseñado para transportar hasta 25.000 kg de carga útil. Con cinco ejes y doce neumáticos (seis en el tractor y seis en el semirremolque), recorren aproximadamente 150.000 kilómetros al año, de los cuales el 90% (135.000 km) se realiza en carga y el 10% (15.000 km) en vacío. Operan, también, durante 250 días al año y llegan a acumular cerca de 2.000 horas de trabajo.
A 31 de enero de 2024, los costes anuales para operar este tipo de vehículo en el ámbito internacional se sitúan en 222.029,42 euros. Los costes directos constituyen el 93,9% de este total, es decir, 208.478,33 euros, mientras que los costes indirectos son de 13.551,09 euros, equivalentes al 6,1%. Dentro de los costes directos, los relacionados con el tiempo alcanzan los 74.735,38 euros (33,7%), y aquí se incluyen la amortización del vehículo (22.611,30 euros), la financiación (6.579,66 euros), el personal de conducción (37.649,70 euros), los seguros (6.965,05 euros) y los costes fiscales (929,67 euros).
Por otro lado, los costes kilométricos, que suman 133.742,95 euros (60,2%), se desglosan en el combustible (65.673,80 euros), el consumo de disolución de urea (2.500,16 euros), los neumáticos (8.557,92 euros), el mantenimiento (2.727,30 euros), las reparaciones (5.368,80 euros), las dietas (30.654,95 euros) y los peajes (18.260,02 euros). El combustible, el mayor gasto en esta categoría, deja ver la importancia de una buena gestión del consumo, con un precio del gasóleo A en surtidor de 1,4916 euros por litro, incluido el IVA, y diversos descuentos que se pueden aplicar.
Finalmente, los costes unitarios del vehículo tienen un coste por kilómetro de 1,4802 euros si se consideran los costes totales, y de 1,2762 euros cuando se toman en cuenta solo los costes directos. En términos de coste por hora, los valores son de 111,01 euros y 85,08 euros, respectivamente.
